viernes, 5 de octubre de 2007

Enfoque Racionalista Académico

Es el enfoque más tradicional que ha tenido el currículo. Se le asigna al saber una especie de valor supremo. El objetivo de la acción educativa es la asimilación de conocimientos. Lo anterior requiere de ciertos elementos comunes: las disciplinas, las materias, los contenidos. El valor supremo que se privilegia es la adquisición de conocimientos y la transmisión de información.

La metodología utilizada está normalmente asociada con el rendimiento académico colocando el acento en las clases. La enseñanza se centra fundamentalmente en las exposiciones, donde las ideas se expresan y elaboran en una forma asequible a los alumnos. Los datos se ordenan y se ilustran, a la vez que se formulan y examina problemas que pertenecen al campo de disciplina consideradas básicas y fundamentales.

Se le da especial relevancia a la ciencia, a la sistematización del conocimiento, insistiendo en el contenido mismo y no en los procedimientos; en primer lugar se enseñan conocimientos y no métodos, ni procedimientos ni destrezas, y en segundo lugar, no existe una preocupación por explorar procedimientos didácticos innovadores, sino que se pone el acento en la exposición como el método más apropiado. Estrechamente relacionada con esta situación, se encuentra la afirmación según la cual la base del conocimiento se fundamenta más en la formación que en la experiencia directa del individuo. El alumno escucha charlas y lee libros para aprender, no intenta desarrollar sus propias experiencias, ni crear alternativas creativas frente a los problemas.

En términos de planificación curricular advierte una tendencia a fijar líneas generales a nivel central (ministerios), con cierta flexibilidad de elección de contenidos específicos por parte del profesor del aula. De otra parte, siendo el proceso de elección bastante complicado, hay una fuerte tendencia a recurrir al uso de textos ya preparados, lo que disminuye el trabajo del profesor, pero también reduce el control que éste ejerce sobre las decisiones curriculares.

La evaluación se centra en la repetición de los contenidos sin cuestionarlos; en esta concepción se privilegia la evaluación sumativa. En la actualidad se ha intentado replantear este enfoque, tratando de restar importancia a algunos elementos, entre ellos se reconoce que el conocimiento no es estático ni rígido, sino que está sujeto a cambios; en el proceso científico se acepta la búsqueda de reglas y principios que puedan ser validos.

- Objetivos: Son planteados en términos de lo que espera desarrollar en aspectos intelectuales…“El alumno será capaz de resolver los problemas…”
- Estudiantes: Se centra en el contenido y no en el estudiante. Estos son receptores de información, cumpliendo un rol pasivo, básicamente escucha y lee.

- Profesor: Asume un rol directivo, responsable y transmisor del conocimiento.
- Contenidos: Se valora como un fin en sí mismo, dando importancia a la teoría, a la información, a los datos y a la sistematización del conocimiento científico.
- Metodología: Privilegia los métodos y técnicas tradicionales: clase magistral, lecturas.
- Evaluación: Se evalúa sólo el conocimiento, lo observable y medible. Se privilegian las evaluaciones sumativas y no las formativas.
- Contexto Social: La información proviene del mundo científico y no se considera lo proveniente del mundo social.

1 comentario:

Don Petrucci dijo...

Esta super interesante el articulo. Pero conciderando un poco las experiencias exitosas de los alumnos tesistas de este año yo les pregunto: ¿Que metodologias van a utilizar ustedes en el futuro? hay que considerar que no se puede estar todos los días planeando cosas didacticas...